SENTIDO A LA VIDA
La mayoría de nosotros vamos por la vida preguntando cuál es el motivo de nuestra existencia, cuál es el sentido de nuestra vida; muchos lo preguntamos pero pocos lo sabemos.
Personalmente creo que cuando nacemos, no hay un motivo especial para vivir, por lo menos el recién nacido no lo sabe ni lo decide; ya que dependiendo de la cuna de los padres, ellos ya han trazado un motivo o una meta en la cual se basará nuestra existencia.
A medida que vamos creciendo, las dudas del por qué vivimos aumentan, empezamos a buscarle un sentido a la vida y a crear nuestro propio mundo. No todos los seres humanos tienen el privilegio de encontrar a corta edad un motivo por el cual vivir, es posible que lleguen hasta la vejez y nunca lo encuentren, se pasaron la vida preguntando y nunca encontraron respuestas, o porque sus aspiraciones fueron el de encontrar algo extraordinario y no una simple vida que podían haber disfrutado un poco mejor.
Los motivos de nuestra existencia y el sentido de nuestra vida lo creamos nosotros mismos, a veces no solamente hay un motivo sino varios por los cuales vamos viviendo cada día. No todos podemos legar a ser famosos, no todos tenemos la misma inteligencia e incluso, no todos tenemos la oportunidad de alcanzar la meta que nos propusimos llegar; sin embargo seguimos viviendo, seguimos existiendo, seguimos respirando.
Muchas veces hemos dicho: “estoy o he perdido el sentido a la vida” “estoy o he perdido el motivo por el cual vivo”; ciertamente, hay momentos en que creemos perder y no tener una razón por la que existimos; pero el sólo hecho de reconocer que estamos “perdiendo algo” es suficiente “motivo” para que sigamos viviendo y tratar de encontrar de nuevo, “el sentido y motivo a nuestra vida”.
Siempre que tengo una duda del por qué vivo, trato si no encuentro, de inventar un motivo para seguir viviendo. Pronto llegará un nuevo año, es un buen tiempo para renovar energías y buscar nuevos horizontes.
La mayoría de nosotros vamos por la vida preguntando cuál es el motivo de nuestra existencia, cuál es el sentido de nuestra vida; muchos lo preguntamos pero pocos lo sabemos.
Personalmente creo que cuando nacemos, no hay un motivo especial para vivir, por lo menos el recién nacido no lo sabe ni lo decide; ya que dependiendo de la cuna de los padres, ellos ya han trazado un motivo o una meta en la cual se basará nuestra existencia.
A medida que vamos creciendo, las dudas del por qué vivimos aumentan, empezamos a buscarle un sentido a la vida y a crear nuestro propio mundo. No todos los seres humanos tienen el privilegio de encontrar a corta edad un motivo por el cual vivir, es posible que lleguen hasta la vejez y nunca lo encuentren, se pasaron la vida preguntando y nunca encontraron respuestas, o porque sus aspiraciones fueron el de encontrar algo extraordinario y no una simple vida que podían haber disfrutado un poco mejor.
Los motivos de nuestra existencia y el sentido de nuestra vida lo creamos nosotros mismos, a veces no solamente hay un motivo sino varios por los cuales vamos viviendo cada día. No todos podemos legar a ser famosos, no todos tenemos la misma inteligencia e incluso, no todos tenemos la oportunidad de alcanzar la meta que nos propusimos llegar; sin embargo seguimos viviendo, seguimos existiendo, seguimos respirando.
Muchas veces hemos dicho: “estoy o he perdido el sentido a la vida” “estoy o he perdido el motivo por el cual vivo”; ciertamente, hay momentos en que creemos perder y no tener una razón por la que existimos; pero el sólo hecho de reconocer que estamos “perdiendo algo” es suficiente “motivo” para que sigamos viviendo y tratar de encontrar de nuevo, “el sentido y motivo a nuestra vida”.
Siempre que tengo una duda del por qué vivo, trato si no encuentro, de inventar un motivo para seguir viviendo. Pronto llegará un nuevo año, es un buen tiempo para renovar energías y buscar nuevos horizontes.
Un grano para el molino
BriznaDpaz (Autor)
Diciembre 27, 2008
BriznaDpaz (Autor)
Diciembre 27, 2008
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